No hay una razón real
por la que no puedas hacertu mente pacífica,
tu corazón dichoso,tu vida sosegada,
tu alma triunfante,tu Dios pleno de bendición.
Tan sólo reemplaza tu duda venenosapor tu fe intachable.
```From:Sri Chinmoy,Diez mil llamas en flor - 4, Agni Press, 1979
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