[Sri Chinmoy pide entonces a sus discípulos que traten de invocar Ananda]
Por favor, colocad vuestra mano derecha sobre el corazón. Tratad de sentir dentro de vuestro corazón al niño más hermoso que haya sobre la tierra y en el Cielo. Este niño es el alma. Los hombres verán naturalmente a un niño y las mujeres a una niña. El alma no es masculina ni femenina, pero cuando toma encarnación humana, adquiere una forma. Trata de ver a un niño de tan solo siete días de edad. En términos de evolución espiritual, algunos de vosotros ni siquiera tenéis ese niño de siete días, perdonadme que lo diga. Aunque las almas comenzaron su viaje hace millones de años, hay una o dos personas aquí que tan solo han tenido una o dos encarnaciones humanas. Naturalmente, la evolución de sus almas es quizás tan solo de unas pocas horas o unos pocos minutos en términos puramente espirituales. Ahora, por favor, pensad en el niño de siete días. Entonces, en absoluto silencio, repetid siete veces Ananda.From:Sri Chinmoy,Las cumbres de la conciencia divina: Samadhi y Siddhi, Agni Press, 1974
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