¿Podría hablarnos del tipo de muerte y de renacimiento que se produce en la vida espiritual?

Sri Chinmoy: Si aceptamos la vida espiritual de todo corazón, sinceramente y sin condiciones, podremos sentir que ello representa la verdadera muerte de la ignorancia, de los deseos y de las limitaciones; es la muerte de nuestra conciencia vital limitada, asfixiante, incompleta y oscura. El vital, y no el físico, es el que ansía colmar toda clase de deseos; por ello, esta muerte se produce en el plano vital. Cuando nos comprometemos verdaderamente con la vida espiritual, atravesamos una muerte interior. Ésta es la muerte de nuestro pasado, de la forma de ser que ha creado nuestro pasado.

Construimos el edificio de la Verdad sobre nuestra aspiración, no sobre nuestros deseos y preocupaciones, temores y dudas. El pasado quiso mostramos la Verdad a su manera, pero ha fracasado; por ello, somos actualmente lo que somos. No sabemos si el presente nos mostrará o no la Verdad; pero creemos que la descubriremos, ya sea en el presente inminente, o bien en el futuro próximo, en el futuro que emana del hoy inmediato.

Uno de los misterios en la vida espiritual es que a cada momento estamos muriendo y renovándonos. A cada instante vemos que una nueva conciencia, un nuevo pensamiento, una nueva esperanza, una nueva luz naciente en nosotros. Cuando algo nuevo amanece, vemos que lo antiguo ha sido transformado en algo más elevado, más profundo y más significativo. Así, en la vida espiritual superior podemos ver en cada momento la denominada muerte de nuestra conciencia limitada y su transformación en una conciencia nueva, más luminosa.