Aspiración-Everest. Vol.4

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Mi peregrinaje divino

Mi Amado Señor, mi Amado Amigo, mi Amado Todo, Tú me has dado mi sencillez. Tú me has dado mi sinceridad. Tú me has dado mi serenidad. Tú me has dado mi pureza.

Me has dado la sencillez para que pueda comenzar mi peregrinaje por el camino de mi conciencia corporal. Me has dado la sinceridad para que pueda comenzar mi peregrinaje por el camino de mi dinamismo vital. Me has dado la serenidad para que pueda comenzar mi peregrinaje por el camino de mi visión mental. Me has dado la pureza para que pueda comenzar mi peregrinaje por el camino del deleite de mi corazón.

Mi Señor Supremo, Tú me has dicho además que mi sencillez, mi sinceridad, mi serenidad y mi pureza, únicamente alcanzarán su cumbre de perfección, cuando la gratitud de mi corazón florezca pétalo a pétalo, desarrollándose hasta la perfecta Perfección. Y para ello, lo que necesito es el constante ofrecimiento de mí mismo, el ofrecimiento consciente, fervoroso e incondicional de mí mismo.

Para ofrecerme consciente, constante, fervorosa e incondicionalmente, necesito acercarme a Ti, no como un mendigo desamparado sino como un amigo-amante. Si me acerco a Ti como un mendigo, tal vez me des lo que necesito o lo que quiero. Pero mi cuenco de receptividad será tan pequeño que, aunque me des lo que necesito, no podrá ser mucho; estará lejos de la satisfacción de mi alma. Y si me das lo que yo quiero, tal vez no sea lo adecuado. Por eso, lo que me des, en última instancia, será una fuente de frustración y jamás una fuente de satisfacción.

Mi Señor Supremo, si me das lo que Tú quieres darme, aunque sólo sea una pizca, esa pizca misma, no sólo va a complacer a lo real en mí, el alma, sino que también va a inmortalizar lo humano en mí. Lo humano en mí es mi esperanza humana, mi esperanza terrenal. La esperanza, antes de dar fruto, no es más que ilusión, ensueño y alucinación mental. Pero Tú podrás inmortalizar esa esperanza misma. Y cuando esté inmortalizada, veré mi esperanza bajo la forma de la Visión trascendental de Tu propia Realidad y la Realidad universal de Tu propia Visión.

8:00
18 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Norwalk, Connecticut

Señor de mi vida, Amigo de mi corazón

Mi Bien Amado Supremo, tengo algunos regalos para Ti. Mi primer regalo es mi fervoroso llanto. Mi segundo regalo es mi fructuosa sonrisa. Mi tercer y especial regalo es mi corazón de unidad. Mi cuarto y super especial regalo es mi llama de gratitud.

“Mi niño, soy todo gratitud a ti, y también tengo un regalo para ti. Este es Mi regalo: te necesito infinitamente más de lo que puedas nunca imaginar. Contigo he comenzado el viaje de Mi Visión; contigo alcanzaré la Meta-Satisfacción de Mi Realidad”.

3:00 p.m. 17 de Julio, 1977 En tránsito desde Jamaica, Nueva York a Washington, D.C.

Aceptación

He aceptado al hombre
porque
el hombre está soñando.

He aceptado a la Tierra
porque
la Tierra está trascendiendo.

He aceptado al Cielo
porque
el Cielo está sonriendo.

He aceptado a los dioses cósmicos
porque
los dioses cósmicos están prometiendo.

He aceptado a Dios
porque
Dios está evolucionando y colmando a la vez.

Me he aceptado a mí mismo
porque
estoy aprendiendo el arte supremo de la entrega.

7:30
19 de julio, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

Momentos de vacío

Dices que sufres momentos de vacío. ¿Sabes por qué? No es porque no tengas nada que hacer. No es porque no tengas nada de que hablar. No es porque no tengas nada que leer o escribir. No es porque tu mundo esté falto de amigos. No es porque no puedas confiar en el mundo. No es porque no puedas reivindicar a alguien como tuyo en esta inmensa creación de Dios. No, la razón por la que sufres esos momentos de vacío es que no estás jugando en el jardín de tu corazón con el niño de tu corazón, tu alma.

Si juegas amorosa, alegre, devotamente y sin reservas con tu niño-alma, entonces nunca, nunca sufrirás momentos de vacío, no importa lo que el mundo te dé, no importa lo que el mundo te haga, no importa lo que estés haciendo o lo que vayas a hacer para este mundo nuestro.

Los momentos de vacío te asaltarán a menos y hasta que hagas la cosa adecuada, la única cosa, que es disfrutar de tu constante recreo de unidad con el niño de tu corazón, el alma. Y algo más: tienes que comprender el hecho supremo de que una pequeña y fervorosa sonrisa de tu alma es la salvadora de tu vida, la liberadora de tu vida y la colmadora de tu vida. Si puedes sorprender al alma sonriendo, estás destinado a progresar en tu vida interna y a triunfar en tu vida externa. Y cuando sonríes simultáneamente con el alma, devienes en lo que eternamente eres en el mundo interno: la propia Sonrisa de Satisfacción de Dios. No son los momentos de vacío, sino una sonrisa colmada y colmadora, el único propósito de tu realidad-existencia aquí en la Tierra.

7:40
19 de julio, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

¿Quieres ser perfecto?

¿Quieres ser perfecto en todos los aspectos? Entonces, déjame hacerte algunas preguntas sencillas pero iluminadoras de la vida. ¿Está tu mente receptiva a un pequeño cambio? Si lo está, pídele a tu mente que no sea tan dudosa y recelosa todo el tiempo. ¿Está tu vital receptivo a un pequeño cambio? Si lo está, pídele a tu vital que no trate despóticamente al mundo ni trate de aplastar al mundo bajo su peso pesado. ¿Está tu cuerpo receptivo a un pequeño cambio? Entonces, pídele a tu cuerpo que no duerma desvergonzadamente tantas horas seguidas. ¿Está tu corazón receptivo a un pequeño cambio? Si lo está, pídele a tu corazón que no sea tan desamparada y desesperadamente tímido.

Pedirás una cosa más a cada miembro de tu familia interna. ¿Está tu mente receptiva a un pequeño cambio? Si lo está, pídele a tu mente que se vacíe de todo contenido por la mañana temprano para que Yo pueda entrar en ella y disfrutar Mi Descanso-Satisfacción al menos durante siete segundos efímeros. ¿Está tu vital receptivo a un pequeño cambio? Si lo está, pídele a tu vital que despliegue las alas de su cariñosa atención sobre todo el mundo. ¿Y qué haré Yo entonces? Con enorme orgullo jugaré con las todo-amorosas alas de cariñosa atención de tu vital. ¿Está tu cuerpo receptivo a un pequeño cambio? Si lo está, pídele a tu cuerpo que despierte, que mire alrededor y Me descubra. Estoy escondiéndome. Si el cuerpo puede seguir mi rastro, estaré más que deseoso de jugar con el cuerpo a Mi Juego del escondite, el cual disfrutan profundamente hasta los dioses cósmicos. ¿Está tu corazón receptivo a un pequeño cambio? Si lo está, pídele a tu corazón que inhale únicamente el hálito de la pureza y nada más. Dile a tu corazón que el hálito de la pureza es lo único que Me sustenta. Cuando me alimento de cualquier otra cosa, sufro todo tipo de dolencias. El hálito de la pureza de tu corazón es lo único que Me alimenta, Me sustenta y Me da el Néctar-Deleite y la Fortaleza-Inmortalidad para continuar Mi Juego cósmico, Mi Danza cósmica y Mi Satisfacción-Unidad cósmica.

7:45 July 19, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

El rey-ignorancia, el hombre-deseo, el Dios-Compasión

¿Dónde está el rey-ignorancia? Está en el trabajo. ¿Dónde está el hombre-deseo? Está en el trabajo. ¿Dónde está el Dios-Compasión? Está en el trabajo.

Si quieres saber cómo trabajan, estoy más que dispuesto a contártelo. El rey-ignorancia trabaja incansablemente. El hombre-deseo trabaja inconscientemente. El Dios-Compasión trabaja incondicionalmente.

El rey-ignorancia quiere devorar al mundo. El hombre-deseo quiere poseer el mundo. El Dios-Compasión quiere iluminar al mundo.

El rey-ignorancia dice: “No quiero amar nada. No quiero amar a nadie. Pero quiero ser amado por el hombre-deseo y por el Dios-Compasión”.

El hombre-deseo dice: “Quiero amar la tentación del rey-ignorancia y quiero ser amado por el Perdón del Dios-Compasión”.

El Dios-Compasión dice: “Quiero amar Mi propia evolución que despierta en el rey-ignorancia. Quiero amar Mi propia evolución que aspira en el hombre-deseo. Quiero amar Mi propia evolución todo-trascendente y todo-iluminadora en Mi propia Barca de Sueño y Ribera de Realidad”.

22:15
19 de julio, 1977
Co-op City
Bronx, Nueva York

Nunca es demasiado tarde

Nunca es demasiado tarde para que me vuelva un buen instrumento de Dios.

Nunca es demasiado tarde para que rece a Dios y medite en Dios en las primeras horas de la mañana.

Nunca es demasiado tarde para que sirva a mi Amado Supremo en mis hermanos y hermanas: la humanidad.

Nunca es demasiado tarde para que ame a mis hermanas y hermanos de la humanidad en mi Amado Supremo.

Nunca es demasiado tarde para decirle a mi dulce Señor que soy sólo para Él. Para verlo cara a cara, para amarlo, servirlo y colmarlo, para eso he visto la luz del día.

Nunca es demasiado tarde para que aprenda lo que de verdad soy en el mundo interno y desaprenda lo que de verdad no soy en el mundo externo.

Por último, nunca es demasiado tarde, no sólo para tener una conversación de corazón a corazón con mi Piloto Interno, sino también para convertirme en Su imagen misma. Sé que mi Señor Supremo sólo estará totalmente complacido conmigo cuando llegue a ser como Él, otro Dios, pues Él quiere que yo sea Su compatriota, no Su esclavo.

Sí, hay algo para lo que ya es demasiado tarde, y porque ya llego tarde para ello, estoy infinitamente agradecido a mi Amado Supremo. ¿De qué se trata? Se trata de mi vida de deseo. Es demasiado tarde para que regrese a mi vida de deseo. Y hay algo más que también es verdad: nunca más podré regresar al reino animal, ¡nunca!

6:15
20 de julio, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

Dios ha hecho el mundo redondo

Dios ha hecho el mundo redondo. ¿Sabes por qué? Quizá lo sabes. De hecho, todo el mundo podría aportar una respuesta según su luz interna y a su perspectiva externa. Según mi conocimiento interno, quisiera decir que Dios ha hecho este mundo redondo para que todos podamos sentarnos en círculo a Su alrededor, sin que la visibilidad de nadie quede obstruida por otros. Si otros obstruyen nuestra visibilidad, naturalmente nos sentiremos tristes y desgraciados. Por eso Dios, el Autor de todo Bien, ha hecho nuestro mundo redondo, para que podamos verle fácil y directamente; y si queremos, lo cual deberíamos, podemos mirarle devota y fervorosamente.

Para ser miembros del círculo de Dios, tenemos que permanecer en nuestros corazones. ¿Cómo permanecer en nuestro corazón? Hay muchas maneras, pero la más fácil y efectiva, es sentir que el círculo creado por Dios para nosotros, no sólo es nuestro círculo salvador, sino también nuestro círculo hermano y nuestro círculo hermana. Si consideramos este mundo redondo nuestro como un elemento extraño o como una obstrucción y una barrera, si sentimos que tenemos que ir más allá del círculo del mundo, y para ello romperlo en pedazos, cometemos un gigantesco disparate. No, este círculo es nuestro círculo de unidad, desde donde todos podemos ver a nuestro Amado Supremo conforme a la receptividad de nuestro corazón, la luminosidad de nuestra alma y la creatividad abnegada de nuestra vida.

6:20
20 de julio, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

Soy un donador

¿Soy un donador? Sí, lo soy. ¿Soy un donador alegre y lleno de alma? No, desgraciadamente no. Esto quiere decir que no sólo estoy ofreciendo mi rosa sino también muchas, muchas espinas junto con ella.

¿Soy un donador? Sí, lo soy. ¿Soy un donador alegre y lleno de alma? No, desgraciadamente no. Esto quiere decir que no sólo estoy ofreciendo mi mundo de esperanza sino también mi mundo de frustración junto con él.

¿Soy un donador? Si, lo soy. ¿Soy un donador alegre y lleno de alma? No, desgraciadamente no. Esto quiere decir que estoy ofreciendo a todos aquellos que me rodean, no sólo mi mundo libre de aspiración, sino también mi mundo ligado al deseo.

¿Cómo puedo llegar a ser un donador alegre y lleno de alma para liberarme y liberar a los demás? Puedo llegar a ser un donador alegre y lleno de alma siempre que pueda sentir que el donador es también un receptor. Cuanto más grande es el donador, mejor receptor se hace. Él da porque siente que esa es la única manera de complacer a lo real en él, a su alma. El auténtico donador ofrece al mundo, con alegría y fervor, la belleza todo-iluminadora de su alma, y nunca, nunca, el sueño-fealdad de su cuerpo.

6:35
20 de julio, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

¿Es mi destino?

“Mi Supremo Señor, ¿es mi destino que yo no tenga atajo alguno hacia mi meta-satisfacción? Todos saben que existe un atajo a la meta, pero en mi caso no lo he descubierto aún. Quieres que ame al mundo, quieres que sirva al mundo porque dentro de él se halla Tu propia Realidad-existencia. Pero este mundo Tuyo no ha estado listo, no está listo y tal vez nunca esté listo para que algunos de los instrumentos elegidos, supremamente elegidos, despierten a la aletargada vida humana. ¡No! Ninguna figura espiritual ha triunfado alguna vez conforme a Tu Volición interna. Tal vez Tú has esperado, esperas y esperarás siempre más de lo que el mundo dormido puede ofrecerte, a Ti a Tus directos emisarios. Mi Supremo Señor, ¿dime cuál fue y cuál es el principal obstáculo para mis hermanos y hermanas amigos que vinieron a la arena terrestre para cambiar radicalmente la faz del mundo como estoy intentando hacer yo también?”

“Tú tienes un único obstáculo, ellos tuvieron un único obstáculo, y este obstáculo es, y ha sido siempre, insuperable. ¿Sabes cuál es el obstáculo? La desobediencia, que se convierte actitud desafiante del mundo. La semilla de esta desobediencia es la falta de un corazón de unidad. Hijo mío, desafortunadamente, no hay un atajo para ti, puesto que te has vuelto inseparablemente uno Conmigo. Las almas que han realizado a Dios no tienen atajos, porque han aceptado Mi carga como su propia carga. Este mundo niega y desafía todos los atajos, pero tú, Yo y otros que estamos en la misma barca debemos entablar amistad con la paciencia de nuestra Eternidad.”

6:45 20 de julio, 1977 Jamaica High School Track Jamaica, Nueva York

¿Qué estoy haciendo?

¿Qué estoy haciendo? ¿Estoy amando a Dios-el-hombre? No. ¿Estoy sirviendo al hombre-el-Dios? No.

¿Qué estoy haciendo? ¿Estoy clamando por un mundo mejor? No. ¿Estoy pensando en transformar mi vida externa? No. ¿Estoy contemplando colmar mi vida interna? No.

¿Qué estoy haciendo? ¿Estoy deseando la destrucción del mundo? No. ¿Estoy deseando comenzar una nueva vida para jugar otra vez como un niño –despreocupado, sin ningún pensamiento, ninguna duda, ningún recelo, ningún temor, ninguna ansiedad? ¿Estoy añorando aquellos días dorados de mi infancia? No, no.

¿Qué estoy haciendo? ¿Estoy mostrando un apego excesivo al Deleite celestial, a las diosas y dioses cósmicos? No, no. ¿Estoy mostrando una amarga, hastiada repulsión por el mundo, por este mundo grosero, sin aspiración? No, no.

¿Qué estoy haciendo entonces? Sencillamente estoy navegando mi barca de esperanza hacia una ribera. Tal vez es una ribera de incertidumbre y tal vez es una ribera florida de ensueño. No lo sé, ni quiero saberlo. Si supiera que es una ribera de incertidumbre, me vería condenado a la frustración-destrucción; y si supiera que es una ribera florida de ensueño, entonces, una desvergonzada complacencia-relajación se filtraría por todo mi ser y dominaría mi existencia terrenal. Por consiguiente, dejo mi destino enteramente a los Pies del hacedor de mi destino, mi Amado Supremo.

8:10
20 de julio, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

Sin el hombre y sin Dios

¿Puedo hacer algo sin el hombre? Sí, puedo. Sin el hombre puedo hacer muchas, muchas cosas, por no decir todas y cada una de las cosas. Si rezo a Dios para que me conceda la capacidad de hacer todas las cosas sin ayuda de la humanidad, estoy seguro de que me concederá esa gracia.

Hago tantas cosas sin el hombre, precisamente porque mi Padre Todopoderoso, mi Amado Supremo, me ha dado la capacidad. Miro a mi poderoso hermano, el sol, sin el hombre. Miro a mi hermosa hermana, la luna, sin el hombre. Miro a mis dulces hijas, las estrellas, sin el hombre. Miro una y otra vez a mi Padre, Dios, y a mi Madre, Dios, sin el hombre.

Pero, ¿puedo hacer algo sin Dios? ¡No, imposible! ¿Por qué? No puedo hacer nada sin Dios porque no puedo vivir sin Dios. ¿Cómo es que no puedo vivir sin Dios? ¿Será porque Él es todo Benevolencia y todo Amor? ¡No, no! ¿Será porque Él es todo Atención y todo Compasión? ¡No, no! ¿Será porque Él está en todas partes? ¡No, no! ¿Será porque Él es mi esencia y mi substancia? ¡No, no!

Entonces, ¿por qué razón no puedo vivir sin Dios? No puedo vivir sin Dios precisamente porque no puedo vivir sin lo que soy. ¿Puedes tú vivir sin lo que eres? ¡Imposible! Si eres uno con Dios, tienes a Dios dentro de ti de la misma manera que el ciervo tiene el almizcle. El ciervo y el almizcle son inseparables. Cuando una flor tiene fragancia, la flor y la fragancia son inseparables. Igualmente, Dios-la-Belleza que está dentro mí y Dios-el-poseedor de la Belleza, son inseparables. Así pues, no puedo vivir sin Dios, puesto que Él es lo que soy y lo que tengo. Tú tampoco puedes vivir sin lo que tienes y lo que eres. Lo que tienes y lo que eres será siempre la misma Realidad-Existencia: Dios. Por lo tanto, tú y yo no podemos vivir sin Dios, y mucho menos hacer algo sin Dios.

8:15
20 de julio, 1977
Jamaica High School Track
Jamaica, Nueva York

Mi conversación de corazón a corazón

“Oh hombre, déjame tener una charla de corazón a corazón contigo. Hombre, Yo te amo y te sirvo. Pero tú no crees en Mi Amor, no crees en Mi Servicio. Para pesar Mío, sospechas de Mí. Para pesar Mío, sientes que Mi Amor te está atando, que te está atando a la realidad vinculada a la tierra. Sientes que Mi Amor te ha encadenado, enredado, enjaulado. Tú quieres ser un ave libre, una existencia-realidad libre, pero sientes que Mi Amor por ti te está atando de todas las formas posibles. Esta es la realización a la que has llegado, hombre.

“Estoy teniendo una conversación de corazón a corazón contigo, por tanto, quiero decirte que de ningúna manera te estoy atando. Solo te estoy ayudando, con Mi Amor y Mi Servicio, a llegar a ser uno con la vastedad, uno con la inmensidad, uno con la Eternidad, Infinitud e Inmortalidad de Dios, uno con el Deleite-Unidad mismo. Un día creerás en esta conversación Mía de corazón a corazón, hombre. Un día tendrás fe en Mi fervoroso Mensaje, en el intenso Mensaje de Mi Vida, que te acabo de ofrecer.”

“Oh Señor, permíteme tener una conversación de corazón a corazón Contigo. Oh Supremo Señor, yo no Te amo, yo no Te sirvo, a pesar del hecho de que a veces estoy completamente decidido a amarte y servirte condicionalmente, aún cuando no está en mi capacidad amarte sin condiciones. Pero, lamentablemente, fracaso incluso en amarte condicionalmente, fracaso incluso en servirte condicionalmente. Mi Supremo Señor, ¿eso se debe a que amo a la humanidad más que a Ti? ¿Es por eso que el amor verdadero no viene de mí hacia Ti? ¿Es porque Tú no eres para ser amado como yo quiero amarte, con todas mis necesidades terrenales y necesidades celestiales, con todo lo que yo creo que son mis necesidades? ¿Es porque soy autosuficiente sin Ti? Estar sin el hombre no es imposible, pero estar sin Ti es la imposibilidad misma. Pero ¿es porque en cierta medida puedo vivir sin Ti? Cuando vivo en mi noche-ignorancia, no vivo en Ti o para Ti. ¿O es porque mi orgullo, mi desproporcionado orgullo, considera que está por debajo de su dignidad vivir Contigo dentro de la humanidad? ¿Es debido a todo esto que estoy separado de Ti y me resulta imposible ofrecerte verdadero amor? Mi Señor, ¿podré alguna vez amarte devotamente, podré alguna vez servirte con toda mi alma, podré alguna vez reclamarte como mío, muy mío, a partir de la convicción interna que Tú eres mío y yo soy Tuyo? ¿Podré alguna vez servirte y amarte para el regocijo de mi corazón?”

“Hijo mío, ¿qué es lo que quieres? ¿Quieres amarme o quieres demostrarme que Me amas? Hay una gran diferencia entre tu amor y tu demostración de amor. Tu amor por Mí y tu deseo de demostrar tu amor por Mí son dos cosas diferentes. No tienes que demostrar tu amor hacia Mí en la medida en que mantengas el clamor interno de amarme. Este clamor interno no es teórico, es la viabilidad misma. Es la cima de la viabilidad. Yo soy el eterno Amante y tú eres Mi espejo, por tanto, debes saber que cuando te miro veo Mi propio reflejo. Permanece como Mi espejo y Mi Amor a ti será tu amor a Mí, ya que Me veo solo a Mí aquí en la tierra y allá en el Cielo. No veo ninguna cosa que no sea Yo Mismo. No veo a nadie como otro. Solo me veo a Mí Mismo, a Mi Ser más amplio, a Mi Ser universal, a través de ti, Mi espejo. A través de ti, me veo a Mí Mismo, Mi propio reflejo. Por eso, no tienes que demostrar tu amor por Mí. Simplemente mantén el clamor interno de amarme devotamente, con toda el alma y sin condiciones. Este clamor interno no solo es Mi divina Voluntad en ti, sino también la suprema ejecución de Mi divina Voluntad en ti y a través de ti.”

“Yo amo a Mi creación. En consecuencia, vivo en Mi creación. Si esta sencillamente implora por amarme, eso es más que suficiente. No necesito ninguna otra prueba. Esa es la prueba misma: el clamor, el clamor, el clamor fervoroso, solo por Mí, solo por Mí”.

8:20 20 de julio, 1977 Jamaica High School Track Jamaica, Nueva York

Nunca hagas una promesa externa

Mi hermano Chitta solía decirme: “Nunca, nunca hagas una promesa externa. Tan solo hazte interiormente la promesa de lo que quieras hacer en tu vida y con la vida de los demás. En el momento en que le dices al mundo exteriormente lo que vas a hacer, o lo que esperas que otros hagan por ti, por los demás, o por ellos mismos, las fuerzas hostiles te atacarán invariablemente de forma directa. Luego, otras fuerzas no divinas intentarán entrar en ti: los celos de la humanidad, la inseguridad de la humanidad, la duda de la humanidad y numerosas fuerzas incorrectas.

“Cuando tu promesa está en el mundo interno, las fuerzas no divinas permanecen inactivas. Creen que se trata simplemente de una ilusión. Cuando conversas contigo internamente, ellas creen que no se trata realmente de una promesa. Pero cuando abres la boca para que el público oiga, para que la humanidad oiga, entonces estás expuesto. En todo momento tu voluntad interna tiene que tomar la delantera para cumplir tu promesa; de lo contrario, si eres incapaz de cumplir tu promesa, serás asaltado por la duda de ti mismo y la burla de ti mismo. El mundo no tiene que burlarse de ti. Tú mismo, tu propia sinceridad, se burlará de ti. Por tanto, es mejor mantener guardada tu promesa dentro de tu corazón: no pronunciarla desde tu lengua; ni siquiera tenerla en la punta de la lengua.”

Aquí, no estoy haciendo caso a mi hermano, no estoy haciendo lo correcto. Estoy prometiendo cosas externamente todo el tiempo: voy a escribir tantas canciones, voy a hacer tantas pinturas, haré esto, haré aquello. Pero soy el niño malcriado de la familia. Hago exactamente lo opuesto a lo que me piden que haga. En consecuencia, estoy pagando el castigo muy bonitamente con mis discípulos. Y no solo soy el niño malcriado en mi familia, no solo exploté el afecto y el amor de mi familia, sino que también exploto el Amor, el Afecto, la Bendición y la Compasión de mi Bien Amado Supremo cada día, cada hora, cada minuto, cada segundo. Siempre siento que si algo sale de mis labios, Él estará ahí para mantener mi promesa, para justificar mi promesa. Esta es mi convicción interna. Sé que no he sido nada, no soy nada, seguiré siendo nada a los ojos de la humanidad. Pero a los Ojos de mi Padre, en el Corazón de mi Padre, yo soy todo, puesto que solo Lo amo y Lo necesito a Él, solo a Él, solo a Él.

8:30 20 de julio, 1977 Jamaica High School Jamaica, Nueva York

Lucha

“Mi Supremo Señor, ¿Apruebas mi vida de lucha? ¿Apruebas el progreso que hago a través de la lucha? Yo siento que solo progreso cuando tengo luchas, solo cuando tengo que superar obstáculos siento que hago algún progreso.

“Hijo mío, estás totalmente equivocado. La vida espiritual, la vida verdadera, no necesita ninguna lucha. Hay dos clases de lucha que se originan o bien dentro o bien fuera de tu existencia. Dentro de ti hay miedo, duda, ansiedad, preocupación, sospecha, inseguridad, impureza, y muchas fuerzas negativas. Estas fuerzas negativas a veces se desatan. Estas fuerzas negativas se encuentran también fuera de la realidad de tu cuerpo, fuera de la realidad de tu propia existencia, y vienen a atacarte. Cuando haces salir tus propias fuerzas negativas, cuando estas fuerzas que vienen de dentro salen al frente, comienza tu lucha. Así mismo, cuando las fuerzas del exterior te atacan, comienza tu lucha. Por tanto, lo que tienes que hacer es iluminar las fuerzas negativas que hay dentro de ti para que lleguen a ser fuerzas positivas. Y las fuerzas que te están atacando desde fuera han de ser desafiadas, combatidas y conquistadas.

“Dices que solo progresas cuando tienes que enfrentarte a luchas. Tal vez creas que la vida de lucha es una oportunidad para progresar. Pero tal vez hay otros factores que no ves en absoluto. Una vida de lucha puede convertirse fácilmente en una vida de revuelta. Luchas para recibir algo, para colmar tu deseo; pero llega el día en que ves que no hay esperanza alguna de satisfacer tu vida de deseo. Entonces te rindes porque estás frustrado, y de la frustración surge la revuelta. Rezas mucho, meditas mucho, haces muchas cosas para complacerme, pero porque no satisfago tu deseo, sientes que no estoy complacido. ¿Entonces, qué haces?: te rindes. Y algo más: te sientes frustrado y quizá incluso te rebeles contra Mi Existencia. Entonces dejarás de rezar y meditar y no intentarás mantener conscientemente ninguna conexión Conmigo”.

Por eso digo a los discípulos que sean cuidadosos. Una vida de lucha no indica una vida de progreso. Hay muchas fuerzas a vuestro alrededor, muchos obstáculos a vuestro alrededor, que no son queridos ni llamados. Así que no hagáis salir vuestras propias fuerzas negativas que toman la forma de lucha. No, no, esa es la manera incorrecta. No agreguéis más fuerzas sin luz y no os creéis más problemas. No, no, simplemente tened la actitud de un niño. Sed espontáneos, sed felices. Para poder conseguir una sonrisa de sus padres, un niño no crea problemas. Lo hace todo espontáneamente, y con su acción espontánea está haciendo felices a sus padres. El Creador y la creación también se comportan así. Cuando la creación le ofrece una sonrisa al Creador, el Creador es alimentado y nutrido. Él siente que lo ha obtenido todo en ese momento.

Cuando el niño sonríe, aunque solo sea una mínima sonrisa, la madre siente que ha conseguido el mundo entero. De modo similar, cuando la madre o el padre sonríen, el niño siente que ha conseguido el mundo entero. La madre está mendigando y el niño está mendigando. Aquí también, Dios el Creador y Dios la Creación son igualmente mendigos. O puedes decir que ellos solo pueden llegar a ser completos, integrales y totales cuando intercambian sus mutuas sonrisas.

Como buscadores, tenéis que ofrecer vuestra sonrisa a través de la acción espontánea, puesto que la acción espontánea misma es la sonrisa. Así pues, creced solo en esa sonrisa. Actuad como el niño: sed espontáneos en todo lo que hagáis y digáis. Dentro de esa espontaneidad veréis vuestra sonrisa, y dentro de la sonrisa veréis vuestra espontaneidad. Vuestra sonrisa y la Sonrisa de Dios se mantienen vivas mutuamente, y así lo harán por toda la Eternidad. Lo que Dios y el hombre necesitan el uno del otro es una sonrisa conmovedora, una sonrisa fructuosa. Dentro de la minúscula semilla de una sonrisa existe íntegro el Árbol cósmico de la Vida. Por tanto, no intentes construir tu vida a través de la lucha. Ese es el camino equivocado. No sigas el camino de la lucha: sigue únicamente el camino de la espontaneidad, el camino de la sonrisa espontánea, que es el único alimento, la única plenitud para Dios y el hombre.

12:15 20 de julio, 1977 Centro Sri Chinmoy Jamaica, Nueva York

Mensajes especiales

Nuestro Amado Señor Supremo tiene un mensaje especial para ti. Hoy te otorgará la paz, para ti y para tu mente. Hoy tendrás paz en la mente.

Nuestro Amado Señor Supremo tiene un mensaje especial para él. Hoy nuestro Amado Supremo otorgará amor a él y a su corazón. Su corazón será inundado de amor.

Nuestro Amado Señor Supremo tiene un mensaje especial para mí. Hoy me otorgará, a mí y a mi vida, un caudal continuo de certeza, la certeza de que soy de Él y para Él.

Do you have any special message for our Beloved Supreme? Does he have any special message for our Beloved Supreme? Do I have any special message for our Beloved Supreme?

¿Tienes tú algún mensaje especial para nuestro Amado Supremo? ¿Tiene él algún mensaje especial para nuestro Amado Supremo? ¿Tengo yo algún mensaje especial para nuestro Amado Supremo?

Tu silencio me dice que no tienes ningún mensaje especial para el Supremo, pero yo quisiera decir que tú sí tienes un mensaje especial. “Tú” quiere decir tu alma; ahora tu alma está hablando a través de mí. El mensaje de tu alma, de lo real en ti, para el Supremo, es este: a partir de ahora, vas a navegar en Su Barca alegremente y sin reservas.

Su silencio me indica que no tiene hoy un mensaje especial para el Supremo, pero yo quisiera decir que él sí tiene un mensaje especial, aunque no sea consciente de ello. Su alma, lo real en él, tiene un mensaje especial para el Supremo, y yo estoy entregando ese mensaje a su mente externa. El mensaje especial que su alma tiene para el Supremo es el siguiente: a partir de ahora, él se volverá consciente, fervorosa e incondicionalmente, un instrumento puro y seguro del Supremo. Esta es su promesa a nuestro Amado Supremo.

Yo también tengo un mensaje especial para el Supremo. Soy totalmente consciente de mi propio mensaje especial, y es este: quiero vivir únicamente para Él. Cuando la muerte sea necesaria, quiero morir únicamente para Él. Pero en las más profundas estancias de mi corazón, sé que mi Señor es la Vida de la Infinitud, la Vida de la Eternidad, la Vida de la Inmortalidad. Si Le colmo a Su propia Manera, entraré en la Vida infinita, eterna e inmortal. Entonces, no puede haber muerte alguna para mí. Este es el mensaje especial que quiero ofrecer a mi Amado Supremo: que vivo únicamente para Él y que moriré únicamente para Él.

Cada mensaje especial es el heraldo de un nuevo amanecer, de una nueva revelación, de una nueva plenitud. Cada mensaje especial es nada menos que un fervoroso y fructífero mensaje. Cada mensaje comienza una nueva vida de auto-rescate del mundo de la ignorancia. Cada mensaje es un auto-descubrimiento en el mundo de la conciencia. Cada mensaje es un proceso de auto-ofrecimiento que, con el tiempo, trasciende nuestra más alta imaginación. Cada mensaje es nuestra transformación en la imagen misma de Dios.

Estamos complacidos con Dios cuando nos ofrece un mensaje especial. En el caso de Dios, Él no solo está complacido con nosotros cuando le ofrecemos un mensaje especial, sino que también está orgulloso de nosotros, pues siente que nuestro mensaje no es solo un mensaje sino también una promesa. No es solo una promesa sino también el heraldo de un nuevo amanecer. No es solo el heraldo de un nuevo amanecer sino también una satisfacción todo colmadora.

12:30
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Transformación

La transformación es como la casa que se convierte en hogar únicamente cuando en ella hay paz, alegría, armonía y amor. Antes, la casa está ahí, una amalgama de ladrillos, arena, madera y objetos materiales; pero esas cosas son inútiles e insignificantes a menos que haya paz, amor, alegría y unidad dentro de la casa. Cuando estas cualidades son tangibles, la casa se transforma en un hogar.

La vida humana carece totalmente de significado a menos que haya amor en ella. Es una vida, es una creación de Dios, pero esta creación es vana a menos y hasta que el amor exista en ella. Sólo cuando el amor llena la vida, ésta es significativa y fructífera. Lo que necesitamos es transformar la casa en hogar. Lo que necesitamos es transformar la vida por medio del amor.

Consideramos a la mente humana como el logro más alto sobre la Tierra. Pero esta mente no tiene ningún provecho, a menos y hasta que la inmensidad se convierte en su otro nombre. La mente no tiene utilidad alguna a menos y hasta que sea transformada por la inmensidad. La mente humana ordinaria intenta siempre mantener su superioridad. Censura y sospecha de los demás. Únicamente obtiene placer cuando ejerce su individualidad. ¿Quién necesita esa mente? Pero cuando la inmensidad entra en la mente, ésta es iluminada y colmada.

No necesitamos a la creación como tal, porque es impotente, desesperanzada e inútil. Pero cuando vemos la Luz de Dios dentro de la creación, lo que vemos no es impotencia sino provecho, no es desesperanza sino esperanza, no es inutilidad sino eficacia. Lo que vemos no es la mera promesa sino la garantía infalible del cumplimiento de dicha promesa. Sólo cuando la Luz del Creador transforma la creación, ésta es significativa y fructífera. De lo contrario la creación terrenal es vana.

Una vida de aspiración, una vida de dedicación, una vida de oración, concentración y meditación, no pueden conducirnos muy lejos a menos que nos hagan sentir que hemos venido al mundo sólo para complacer a Dios y servir a Dios a Su propia Manera. De lo contrario, podemos tener aspiración, podemos tener dedicación, podemos tener la fuerza de la oración, la fuerza de la concentración y la fuerza de la meditación; y estas cosas sin duda nos conducirán a un destino, mas éste no puede ser el destino último que Dios ha creado para nosotros.

Dentro de cada oración, cada concentración y cada meditación tiene que haber un recordatorio de nuestra promesa a Dios: que hemos venido al mundo para complacerle a Su propia Manera. Cada vez que rezamos, cada vez que meditamos, cada vez que hacemos algo, si no hay un recordatorio de nuestra promesa a Dios y no tenemos la confianza de que podemos mantener esta promesa, entonces es inservible. No importa cuantas horas recemos, no importa cuantas horas nos concentremos y meditemos, todo terminará finalmente en amarga frustración. Ciertamente obtendremos resultados de nuestra oración, nuestra concentración y nuestra meditación, pero esos resultados estarán lejos de nuestra satisfacción.

Hemos creado una meta conforme a nuestra propia percepción interna, y es posible que alcancemos esa meta. Pero a menos que la Luz de nuestro Creador ilumine y transforme nuestra imagen interna, no estaremos satisfechos; estaremos frustrados. En todo momento, cuando rezamos, cuando nos concentramos, cuando meditamos, si podemos mantener en primer plano nuestra fervorosa promesa a nuestro Amado Supremo –que para colmarle a Su propia Manera vimos la luz del día– y si podemos mantener nuestra certeza interna, entonces podemos cumplir y cumpliremos esta promesa. Solo entonces nuestra oración, concentración y meditación tendrán verdadero valor, verdadero significado, verdadera plenitud.

El amor tiene que transformar la vida. La inmensidad tiene que transformar la mente. La luz tiene que transformar la creación. La certeza interna y el recordatorio de nuestra promesa a Dios tienen que transformar nuestra somera oración y meditación. Solo entonces aparecerá la satisfacción, la satisfacción completa, la satisfacción permanente.

12:40
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Por qué no comparto

¿Comparto contigo mi inspiración? No. ¿Comparto contigo mi aspiración? No. ¿Comparto contigo mi dedicación? No. ¿Comparto contigo mis experiencias? No. ¿Por qué no comparto contigo mi inspiración, mi aspiración, mi dedicación y mis experiencias? La razón es muy sencilla. Siento que si comparto estas cosas contigo, no seguiré siendo único. Tú tendrás las mismas cosas que yo y mi supremacía desaparecerá. Incluso si consigues en una medida ínfima e infinitesimal las cosas que yo tengo, podrás alegar que tú también tienes lo mismo que yo. Entonces, sólo es cuestión de tiempo el que consigas la misma cantidad que yo tengo o incluso la superes. Por eso te temo. Estoy inseguro y llego a tener celos de ti. En consecuencia, no quiero compartir contigo. Mi satisfacción se acabará cuando lo comparta todo contigo, pues entonces tú y yo estaremos al mismo nivel, lo cual yo no quiero. Quiero estar por lo menos un poco por encima de ti para poder dominarte. ¡Qué pena, qué lástima, esta es la realización a la que he llegado!

Cuando profundizo en mi interior, veo a mi único Amigo, mi Amigo de la Eternidad, mi Amado Supremo. Lo veo todo el tiempo compartiendo conmigo y con el resto del mundo, con toda Su creación. Su inspiración, Su aspiración, Su dedicación, Sus experiencias, todo lo que Él tiene y todo lo que Él es, lo comparte conmigo y con todos. ¿Por qué? ¿Por qué no tiene miedo de perder Su individualidad, Su supremacía, Su Señorío? Si me concede y te concede lo que Él tiene, o incluso si concede una porción de ello, ¿eso no hará de Él un Dios inferior? ¿No nos convertirá a nosotros en Sus iguales?

Mi Supremo Señor me dice que soy un completo estúpido. Cuando Él me da algo, no pierde nada. Al contrario, Él gana. Su ofrenda de inspiración, aspiración, dedicación y experiencia, es como el caudal de un río. Cuando un río fluye no pierde nada. Tan sólo abarca más territorio y gana en tamaño y en fuerza. Su inspiración, aspiración, dedicación, experiencias –todo lo que Dios tiene– Él las lleva Consigo. Él no separa estas cosas de Su Existencia. Él las lleva, las lleva todas hacia nosotros. Desde mí van hacia ti; desde ti van hacia otros. Él jamás pierde Su singularidad, Sus logros, Sus atributos, Sus posesiones. Al contrario, sólo las distribuye aquí, allí y en otros sitios. Él quiere que estén esparcidas por todas partes, pues sabe que la creación entera le pertenece.

Yo quiero expresar mi singularidad mediante mi sentido de separatividad. Existo para mí mismo y quiero decir y mostrarle al mundo que soy único, que nadie es mi copia calcada. Al mismo tiempo, no quiero ser la copia calcada de nadie. No, yo quiero ser siempre único. Nadie me igualará, nadie tendrá el mismo molde, el mismo modelo, las mismas experiencias, la misma existencia-realidad que yo tengo o que yo soy. Así pienso respecto a mi singularidad.

Pero mi Señor Supremo tiene otra forma de ver Su singularidad. Él siente que Su singularidad sólo está expresada adecuadamente cuando Él ve Sus logros y Sus posesiones aquí, allá y en todas partes. Haciendo a cada uno verdaderamente Suyo, sintiendo que cada uno es Suyo y que Él pertenece a cada uno, sintiendo que Él es para ellos y ellos para Él, así siente Su propia singularidad en cada uno.

Yo quiero establecer mi singularidad mediante la separatividad. Dios quiere establecer Su singularidad mediante la multiplicidad. Él quiere dedicar toda Su Visión-Luz a Su creación, pues siente que sólo la aceptación de Su Luz por parte de la creación puede hacerle universalmente colmador y universalmente colmado. Así pues, Él quiere este tipo de singularidad: el Uno unido con la multitud, una canción de unidad con una realidad de unidad. En cada momento el Creador de Unidad quiere entonar Su Canción de Unidad con Su creación de unidad, porque siente que esa es la única manera en que Su singularidad puede ser manifestada a través de lo largo y ancho del mundo.

12:50
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Sustitutos

Nosotros sustituimos muy a menudo, pero Dios no necesita ningún sustituto. Cuando jugamos, si un miembro de nuestro equipo está lesionado, conseguimos en seguida un sustituto. Para todo lo que hacemos en la Tierra, estamos dispuestos a buscar un sustituto si la necesidad lo requiere. Pero en el caso de Dios, Él no necesita sustitutos. Nunca quiere un sustituto en Su Equipo. ¿Por qué, por qué?

Dios quiere que tú estés en Su Equipo y ocupes un puesto especial. Quiere que estés en un lugar concreto, que hagas una cosa en particular en Su Juego Cósmico. Puedes decir que hoy no te sientes bien, que hoy tu estado de ánimo no es muy alegre, que hoy estás mentalmente alterado, que hoy te domina la apatía. Puedes tener millones de razones para querer descansar y tener un sustituto.

Pero Dios dirá: “Quieres un sustituto pero, ¿no te das cuenta de que a cada persona le ha sido asignada una posición? En Mi Juego Cósmico, quiero que tú desempeñes un papel especial. Si Me ofreces un sustituto, éste se encontrará fuera de lugar; él tiene su propio papel que desempeñar. En el juego cósmico del fútbol, tal vez te pida que juegues de delantero y a tu amigo le pida que juegue de lateral derecho. Si sólo porque tu ánimo esta decaído, si sólo porque estás alterado, si sólo porque estás enfadado Conmigo, si sólo porque algo va mal quieres que alguien te sustituya ¿no crees que esa persona en particular estará fuera de lugar? Si la otra persona hace tu parte, no podrá hacer la suya. Si envías constantemente a un sustituto, si el mundo entero quiere enviar sustitutos, ¿cómo pueden desempeñarse entonces todos los papeles? ¿Cómo pueden ocuparse todas las posiciones que deben ocuparse en Mi creación?

“Jamás aceptaré un sustituto para ti en Mi Equipo cósmico. Tienes que jugar tu parte, al igual que él tiene que jugar la suya. Si lo saco a él para que te sustituya, su sitio quedará vacío. No, cada uno tiene que hacer su propia parte; sólo entonces podemos luchar contra la ignorancia. Si cada uno se encuentra en su posición adecuada, si cada uno juega incansable, con toda el alma y sin condiciones para complacerme, sólo entonces puedo luchar contra la ignorancia. Sólo entonces ganaremos la lucha crítica entre lo no-divino y lo divino, entre la oscuridad de la ignorancia y la luz de la sabiduría. Nunca aceptaré a un sustituto. Aceptar a un sustituto es debilitar el equipo. Si sustituimos a un jugador en particular, ¿quién va a ocupar el lugar que queda vacío?”

No puede haber sustitutos en el Equipo de Dios. Haz tu parte, deja que él haga la suya y deja que yo haga la mía. Sólo entonces nuestro Piloto Supremo, nuestro Capitán Supremo alcanzará inevitablemente la victoria. ¿Y para quién es esa victoria? No sólo para Él, sino también para nosotros; puesto que somos uno, eternamente uno. El Padre y los hijos son eternamente uno, la Madre y los hijos son eternamente uno. Por eso no puede haber sustitutos en el Juego Cósmico de Dios.

13:00
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Ahora

Siempre somos propensos a decir que no es demasiado tarde para hacer algo ¿pero decimos alguna vez que no es demasiado temprano para hacer algo? No es demasiado temprano para hacer nada en la vida. No es demasiado temprano para rezar en las primeras horas de la mañana. No es demasiado temprano para realizar a Dios. No es demasiado temprano para revelar a Dios. No es demasiado temprano para manifestar a Dios. Cuanto antes realizamos a Dios, antes revelamos a Dios, antes manifestamos a Dios, antes empezamos con un nuevo comienzo, aspirando a un objetivo más elevado, más iluminador, más colmador.

En la vida espiritual, no hay tal cosa llamada temprano. Este momento, el eterno Ahora, es el único salvador, el único liberador, el único colmador. Levantarse a las tres de la mañana para meditar es una tarea difícil. Pero si dices que es demasiado temprano, te diré que te equivocas. Te equivocas porque lo que llamas temprano o tarde es decidido por tu mente. Es tu mente quien ha descubierto que las tres de la mañana es temprano, que las seis es tarde. Es tu mente quien te dice que las tres es demasiado temprano, que las ocho es demasiado tarde.

Si vas más allá de la mente, no existe hora temprana ni tardía. Solo existe una hora: la Hora de Dios. ¿Y dónde está la Hora de Dios? Está dentro del Ahora. ¿Qué es el Ahora? El Ahora es Dios-la Preparación, Dios-la Aspiración, Dios-la Evolución y Dios -la Perfección que se trasciende continuamente.

13:15 20 de julio, 1977 Centro Sri Chinmoy Jamaica, Nueva York

Seguí rezando

Hace muchos, muchos años comencé a rezar. Un día Dios, mi Amado Supremo, se acercó a mí y me dijo: “Estoy satisfecho contigo hijo Mío. Te voy a conceder la Paz”.

Seguí rezando. Algunos años después, Él se acerco a mí y me dijo: “Estoy complacido contigo hijo Mío. Te voy a conceder la Luz”.

Seguí rezando. Algunos años después, mi Señor Supremo vino otra vez. Él me dijo: “Estoy complacido contigo hijo Mío. Te voy a dar el Deleite, el Néctar del Deleite”.

Yo seguí rezando y, algunos años después, Él vino y me dijo: “Hijo Mío, te he dado la Paz, te he dado la Luz, te he dado el Deleite. ¿Qué más quieres? ¿Hay algo más que quieras? ¿Hay algo más que necesites? Si uno tiene Paz, Luz y Deleite, lo tiene todo. En la Paz, la Luz y el Deleite está el poder del mundo, la satisfacción del mundo, la unicidad del mundo, la plenitud del mundo”. Permanecí en silencio y seguí rezando. Mi Señor se marchó en silencio, concediéndome una dulce y pequeña Sonrisa.

Pocos años después vino de nuevo a mí y me dijo: “Hijo Mío, ya veo lo que quieres. Quieres llegar a ser como Yo, otro Dios. Mira, en un abrir y cerrar de ojos hago de ti otro Dios. ¿Estás satisfecho?”. Guarde silencio; seguí rezando.

Él dijo: “Te he hecho como Yo, otro Dios. ¿Aún así tienes que rezar? ¿Qué más necesitas? Paz, Luz, Deleite, unidad, igualdad, –te he dado todo eso. ¿Qué más necesitas? ¿Qué más?”. Permanecí en silencio. Seguí rezando.

Mi Señor dijo: “Ya sé lo que quieres. Quieres jugar conmigo al juego del amante divino y el Amado Supremo. Eso es lo que quieres. Te concedo esta dicha”. Sonreí a mi Señor con mi alma plena y Él me dió Su Abrazo todo-amoroso, todo-revitalizante y todo-colmador.

13:30
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Novedad

Ayer te encontré. Hoy te veo por segunda vez. Eso quiere decir que ya te conozco, que ya no eres un extraño para mí. Te has vuelto mi amigo; tú y yo nos hemos vuelto viejos amigos. Tu edad ha aumentado y la mía también.

Ayer vi algo por primera vez. Hoy lo veo por segunda vez. Eso significa que esa cosa ha envejecido. Ayer sentí algo por primera vez. Hoy estoy sintiendo esa misma cosa. Ayer comí algo por primera vez. Hoy estoy comiendo lo mismo. Eso significa que mi experiencia ha envejecido. Ha dejado de ser algo nuevo.

Todo lo que veo por segunda vez, todo lo que hago por segunda vez, todo lo que siento por segunda vez es automáticamente viejo. Y esa misma cosa, esa misma persona, sentirá lo mismo de mí –que he envejecido.

¿Hay algo que nunca pueda ser viejo? Sí, lo hay: el llanto interno de mi corazón. Este llanto interno siempre es nuevo. Cada día asume una nueva forma de oración, una nueva forma de concentración, una nueva forma de meditación. Cada día consigue algo nuevo de Dios. Te preguntarás tal vez, cómo es posible que tu oración o tu meditación sean nuevas, si rezas todos los días. Pero quiero decirte que no sólo es posible sino además inevitable.

Tal vez pienses que la Paz, la Luz, el Deleite, el Poder y algunos otros atributos de Dios, son todo lo que hay. Pero quiero decirte que no es cierto. Dios es infinito y Sus atributos son infinitos. Así pues, puedes fácilmente tener variedad infinita en tu oración, tu concentración y tu meditación. Cada oración puede fácilmente ser nueva. Cada concentración puede fácilmente ser nueva. Cada meditación puede fácilmente ser nueva.

La oración desafía a la edad. La concentración desafía a la edad. La meditación desafía a la edad. Nuestro llanto interno es la madre y el padre de nuestra oración, concentración y meditación, por tanto, hagamos amistad con este llanto interno. Dejemos que nuestro cuerpo, vital, mente y corazón entablen amistad con este llanto interno. Con este llanto interno, toda nuestra existencia, externa e interna, se convertirá en una realidad-existencia siempre nueva y un Sueño de Dios siempre nuevo, siempre colmador, en nosotros y a través de nosotros.

17:00
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Por qué tienes prisa

¿Por qué tienes prisa? ¿Piensas que el tren de tu aspiración, con destino a la meta-satisfacción, va a salir pronto y que tu cuerpo, vital, mente y corazón no están preparados, que únicamente tu alma está preparada? ¿Por eso tienes tan tremenda prisa?

¿Por qué tienes prisa? ¿Piensas que la Hora de Dios ha sonado mientras estabas profundamente dormido? ¿Por esto estás triste, avergonzado y temeroso? ¿Por eso tienes una prisa tan tremenda por rezar y meditar, y así ver el Rostro de Dios?

¿Por qué tienes prisa? ¿Piensas que el tiempo ha pasado y que tu promesa a Dios sigue incumplida? ¿Te sientes triste y desgraciado porque no eres un hombre de palabra? ¿Sientes que no eres un instrumento de Dios verdaderamente devoto y fervoroso? ¿Por eso tienes prisa por meditar, profundizar en tu interior, hacer lo necesario lo antes posible?

¿Por qué tienes prisa? ¿Porque necesitas desesperadamente una fructífera Sonrisa de tu Amado Supremo como respuesta al llanto de tu alma? Sólo esta fructífera Sonrisa puede dar su alimento-aliento a tu vida, su alimento-amor a tu corazón, su alimento-claridad a tu mente, su alimento-integridad a tu vital y su alimento-pureza a tu cuerpo. ¿Por eso tienes prisa?

Si todas estas preguntas son respondidas afirmativamente, entonces quiero decirte que tienes todos los motivos para tener prisa. Si pierdes hoy el tren de tu aspiración con destino a la meta de la realización, puedes estar seguro de que tendrás que esperar indefinidamente. Si llegas a tiempo, si tomas el tren de aspiración que se dirige hacia la meta de la realización, entonces, inevitablemente, vas a ver todo lo que querías ver, sentir todo lo que querías sentir y ser todo lo que querías llegar a ser. Por consiguiente, no pierdas el tren de la aspiración.

17:10
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Soñando y haciendo planes

¿Estás durmiendo? Entonces duerme. ¿Estás soñando? Entonces despierta. ¿Estás haciendo planes? Entonces mira arriba, mira a tu alrededor.

Si estás durmiendo, duerme; no tengo nada que hacer contigo. Si estás soñando, debo decir que sí tengo algo que hacer contigo. Si estás haciendo planes, entonces tengo todo por hacer contigo.

El que duerme no sabe lo que tiene ni lo que es. Pero tú no estás durmiendo; tú estás soñando y haciendo planes. Por eso sabes lo que tienes y lo que eres. Pero además, has de saber que tu modo de soñar y mi modo de soñar, tu modo de hacer planes y mi modo de hacer planes son diferentes.

Cuando sueñas, entras en un mundo que se está formando y moldeando de nuevo a sí mismo constantemente. Cuando haces planes, quieres ver el inicio, el punto medio y el final de tu proceso creativo. Pero cuando llegues a ser un buscador genuino, verás que el creador en ti nunca tendrá fin. No hay final para la creación; solo hay una realidad que es siempre trascendente.

Aunque tu modo de soñar y hacer planes y mi modo de soñar y hacer planes no sean iguales, no obstante, tú tienes algo y yo tengo algo. Lo que tú tienes no es eficaz, no es efectivo, no es perfecto. Pero lo que yo tengo es eficaz, efectivo y perfecto. Por eso, te ruego o te demando que despiertes, levantes y mires a tu alrededor.

Si tienes una mano, puedes pensar que otro tiene también una mano, aunque tal vez la tuya no sea tan poderosa como la suya. Si tienes un ojo, puedes sentir que otro tiene también un ojo, aunque quizás tu ojo no sea tan hermoso o tan capacitado para la visión como el suyo. Si tienes una conciencia finita, un logro finito, entonces puedes tener conciencia de las posibilidades infinitas de otra persona.

Como buscador genuino, puedes saber que tu estado de sueño es tan sólo el precursor del estado de realidad que otro tiene; puedes saber que tu estado de planificación es tan sólo el comienzo o el precursor de un estado que se encuentra mucho más allá de lo que tu mente puede ver, sentir y alcanzar.

Pero tienes algo; por eso estás destinado a que se te dé más. Si no tienes nada, no se te puede dar nada. Si tienes una pequeña cantidad de energía vital, el doctor puede inyectar la medicina. Pero si estás totalmente muerto, el doctor no te va a dar ninguna medicina. Sólo si el doctor tiene una pequeña esperanza en ti y para ti, te dará la medicina.

En el viaje de tu vida, sólo cuando tienes un ápice de aspiración, Dios te dará aspiración infinita. Estás tratando de realizar a Dios con tu mente planificadora, a tu propia manera. Así que Dios dice: “Pobre hombre. Al menos está intentándolo. Voy a mostrarle la manera correcta, la manera más efectiva”. En ese momento Dios te muestra Su Plan, pero a diferencia de la planificación que tú haces con tu mente humana, el Plan de Dios es Su Visión siempre trascendente.

Cuando Le das a Dios tu modo de hacer algo, Dios te ofrece Su Modo de hacer esa misma cosa. Un niño le da a su padre una moneda que encontró en la calle. Esta es su única posesión y se la entrega a su padre. Podría habérsela quedado, o escondido, o empleado en comprar una golosina, pero le entregó toda su posesión a su amado padre. El padre siente que esa ofrenda de unidad del niño vale infinitamente más que millones de dólares, por lo tanto, le da al niño un billete de cinco dólares.

Si puedes ofrecerle sin reservas al Supremo tus propios sueños humanos, conseguirás entonces el mundo de Su Realidad. Si se lo das por tu propia alegría, el Corazón de Unidad de tu Padre te concederá infinitamente más de lo que necesitas y mereces, pues Su Satisfacción solo está en dar, en hacerte Su amigo, copartícipe y compañero de la Eternidad, compañero de Su Luz de Infinitud y Su Deleite de Inmortalidad. Por eso, si das lo que tienes en tu mundo de sueño, Él te dará el mundo de Su Realidad. Si das lo que tienes en tu mundo mental planificador, Él te dará de inmediato el mundo de Su Visión directa, que florecerá y se convertirá en el mundo de la Perfección y la Satisfacción.

17:20
20 de julio, 1977
Centro Sri Chinmoy
Jamaica, Nueva York

Eres la lámpara de Dios

“¿Eres la Lámpara de Dios, el Supremo?”

“Sí, lo soy.”

“¿Qué es lo que haces?”

“Enciendo amorosamente la llama de la aspiración en el mundo del deseo.”

“¿Eres la Lámpara de Dios, el Supremo?”

“Sí, lo soy.”

“¿Qué es lo que haces?”

“Ilumino devotamente el mundo de la dedicación.”

“¿Eres la Lámpara de Dios, el Supremo?”

“Sí, lo soy.”

“¿Qué es lo que haces?”

“Alimento con fervor al mundo-Salvación de Dios por la mañana. Alimento sin reservas al mundo-Liberación de Dios por la tarde. Alimento sin condiciones al mundo-Realización de Dios al anochecer. Por último, me siento a la mesa con mi Padre de Perfección y Satisfacción, mi Amigo, mi Todo, toda la noche”.

“Mi amigo de la Eternidad, haces mucho por tu Amado Supremo. Ahora yo quisiera hacer algo por ti. Recogeré la más abundante cosecha de gratitud para ti aquí en la Tierra. Recogeré la más abundante cosecha de orgullo para ti allá en el Cielo”.

21:40
20 de julio, 1977
Greenwich Public Library
Greenwich, Connecticut

Nota del editor para la primera edición

Durante los primeros veinte días de julio de 1977, Sri Chinmoy pronunció un centenar de breves charlas. Estas tuvieron lugar en sus conciertos públicos de esraj, en picnics, incluso en el campo de deportes de la escuela local después de sus entrenamientos matinales. Sin embargo, estas piezas apenas pueden realmente llamarse charlas. Poseen una cualidad rítmica, casi musical, que recuerda más al verso libre que a la prosa. Y lo más importante, expresan un flujo de ideas tan sutil y melódico que piden ser sentidas y asimiladas en un plano intuitivo. Antes de pronunciarlas, Sri Chinmoy entraba en un elevado estado meditativo y después hablaba improvisadamente. Estas charlas son, por tanto, expresiones de un estado de conciencia más allá del alcance de la mente: breves, iluminadores estallidos de Luz del ilimitado Sol de Realización del Maestro. Este es el último volumen de una serie de cuatro partes.

Traducciones de esta página: Italian , Slovak , Czech , Ukrainian , French
Esta colección de libros puede ser citada utilizando la clave ea-4