Pregunta: ¿Cuál es la relación entre el corazón espiritual y el poder kundalini en términos de importancia relativa?

Sri Chinmoy: El poder kundalini, se puede decir, está en la superficie, absolutamente en la superficie del corazón espiritual. En la superficie del mar hay olas y todo tipo de movimientos. Cuando un niño ve las olas del océano, queda fascinado. Pero el adulto intentará ir a lo profundo del océano, donde hay una gran calma y quietud, tranquilidad absoluta, pues allí obtendrá la mayor alegría. El adulto se interesa por las profundidades silenciosas y eternas.

Los milagros que puedes llegar a ver del poder kundalini son como el juego de los niños en un jardín. Un niño tiene la capacidad de tomar una flor, o pellizcar a alguien, o demostrar cuánta fuerza tiene arrojando un ladrillo y haciendo todo tipo de travesuras. La Madre Cósmica observa los juegos de sus niños. Igual que una Madre ordinaria, ella disfruta teniendo a sus niños jugando alrededor. “Mis niños pueden saltar, pueden correr, pueden arrojar cosas”, dice ella. “Disfrutemos el juego, el juego cósmico”. Pero el Padre siente que los niños no pueden continuar jugando todo el tiempo. Siente que a veces tienen que estudiar, o serán unos tontos.

Cuando un niño está jugando, está obteniendo alegría, alegría física. Pero cuando estudia, recibe otro tipo de alegría, una alegría más profunda y colmadora. En el plano físico, apreciamos a alguien cuando logra algo. Si alguien hace algo grande en el plano mental, apreciamos a esa persona más. Cuando alguien logra algo en el plano psíquico, los que están en posición de apreciarlo, lo aprecian aún más. Y cuando alguien logra algo en el plano del alma, el plano de Dios, aquellos que lo saben le aprecian más que a nadie. Sri Ramana Maharshi no se preocupaba por el estudio; Sri Ramakrishna no se preocupaba por el estudio. Hay muchos Maestros espirituales que nunca se preocuparon por el estudio. Pero todos los eruditos del mundo occidental deberían tocar los pies de estos hombres no letrados pero de sabiduría infinita. Cuanto más alto, cuanto más profundo vamos, más convincente, más iluminadora, más valiosa es la sabiduría que recibimos. En el reino espiritual, el poder kundalini es como un logro en el plano físico.

Una madre siente que su hijo, incluso si tiene 60 años de edad, es aún su niño pequeño, su bebé. Pero cuando un padre ve que su hijo tiene trece o catorce años, inmediatamente intenta darle toda su sabiduría. Le dice, “Ya no puedes considerarte más un niño. Mañana me puedo morir, y tendrás que reemplazarme y tomar plena responsabilidad de mis tareas”. La madre dice, “¡No! ¡No! ¡No! Quiero que mi niño permanezca aquí conmigo”. Ahora bien, no estoy diciendo ni una palabra en contra de la Madre. Es sólo la naturaleza de la Madre considerar que Sus hijos son Sus niños eternos. El Padre dice, “Sois niños eternos, es cierto; pero tenéis que trabajar para Mí. Tenéis que tomar la responsabilidad del universo entero. Alardear y hacer todas estas cosas es bueno durante cinco años, diez años, veinte años, pero no puede durar para siempre”.

La misma Madre, la misma Madre Cósmica que guarda todo el poder kundalini, que es el poder kundalini, está más allá, mucho más allá de éste. Con Su aspecto del Más Allá siempre-trascendente, Ella se mezcla con Su consorte, Purusha, Shiva o el Absoluto. Con Su Conciencia siempre-trascendente, Ella es una con el Absoluto. Además, con Su Conciencia lúdica, Ella está jugando con Sus niños en Su Juego cósmico.

El Padre le dice al niño que vaya más allá del Juego cósmico, puesto que sólo cuando uno va más allá del juego cósmico puede adquirir la paz, la luz y la dicha infinitas. El Padre dice, “Debes ir más allá de kundalini hacia un estado más elevado de conciencia. Primero entra en sushupti, el estado del sueño profundo. Entonces ve a swapna, el estado de sueño; luego a jagriti, el estado de vigilia; y finalmente entra en turiya, la Conciencia trascendental. Y además, hijos míos, podéis incluso ir más allá de esto y permanecer en sahaja samadhi, que es la unidad constante, espontánea y dinámica conmigo en todos los planos de la Realidad”.

El hijo de Dios, Jesucristo, estuvo en la tierra treinta y tres años. Sólo durante los últimos tres años de su vida realizó milagros. ¿Crees que el mundo aún lo adora y lo venera sólo porque podía caminar sobre el agua o resucitar a un hombre muerto? No, no es a causa de sus milagros por lo que es todavía venerado, sino porque él trajo consigo la Conciencia eterna, la Conciencia infinita. Sri Ramakrishna no realizó prácticamente ningún milagro y hubo muchos, muchos otros Maestros espirituales que no realizaron ningún milagro. Sentían que realizar milagros en el plano físico sería algo infantil en comparación con lo que eran capaces de hacer en el plano espiritual, en la región del corazón, donde habita la paz, la luz y la dicha infinita.

El poder kundalini y todos los poderes milagrosos en la tierra son fugaces, ya que son poderes sujetos a la condición terrenal. Pero el poder del Ser trascendental es infinito e inmortal. Lo más importante en la tierra para un buscador espiritual es el despertar de la conciencia y la realización del Ser, porque esto es eterno. Si alguien realiza algunos milagros, estaremos fascinados. Pero en cuanto regresamos a casa no habrá nada para sostener nuestra fe en lo que ese individuo ha hecho. Parece ser todo magia y superchería. ¿Por cuánto tiempo podremos atesorar al mago dentro de nosotros o frente a nosotros? Pero cuando alguien eleva nuestra conciencia, incluso por un segundo, o si nosotros mismos lo hacemos a fuerza de nuestra intensa aspiración, entonces nuestra fe en esa experiencia perdura, pues es nuestra propia experiencia interior. Cualquier cosa que dura para siempre la necesitamos. Es la Inmortalidad, la Inmortalidad interior lo que necesitamos, y esto viene mediante el despertar y la elevación de nuestra conciencia.