Parte IX — Charla

MJW 13. Sri Chinmoy hizo los siguientes comentarios adicionales el 20 de febrero de 2000 en una función que tuvo lugar en P.S. 117 en Queens, Nueva York.

«En verdad, un viaje místico».

Huelga decir que siempre habrá críticos, pero creo fuertemente que viendo el lado negativo de la humanidad, no podemos hacer ningún progreso. Viendo el lado positivo de la humanidad, progresamos y vemos a los demás progresando. Si algo está en mi campo de acción, estaré satisfecho. Si algo está en el campo de acción de otro, también estaré satisfecho.

Desafortunadamente, el mundo no quiere salir de sus límites. El mundo cree en las cosas antiguas, en los antiguos descubrimientos. Pero hay algo que se llama invento. Si queremos inventar algo, esto ha de venir de una fuente elevada, muy elevada, elevadísima. Mi levantamiento de pesos no se encuentra entre las categorías tradicionales, cierto. Pero si uno va a hacer algo grande para inspirar a la humanidad, entonces ha de ir lejos, lejos, mucho más allá de los límites de la manera tradicional de pensamiento sobre los logros humanos.

Cualquiera que haga algo grandioso de una manera nueva está sujeto a la crítica. La semana pasada, el maestro de tabla más grande del mundo, Ustad Alla Rakha, falleció. Él rompió las barreras tradicionales. Su técnica no era la técnica clásica del pasado. Él inventó su propia técnica, su propio modo de tocar el instrumento, pero cautivaba a la gente y los llevaba al mundo del éxtasis cuando fuera y dondequiera que él tocara. Por lo tanto nuestro gobierno de India le entregó el premio más alto y cuando falleció, el Primer Ministro y el Presidente dijeron cosas muy lindas. El firmamento entero de India lo bendijo con sentimientos superlativos y palabras superlativas. Pero él no siguió ninguna tradición.

De modo que, en este mundo, si un genio nace, no tiene ninguna obligación de seguir los pasos de sus antecesores —en cualquier actividad—. El campo del levantamiento de pesos es muy, muy limitado. En otros campos hay un gran margen. En el mundo del levantamiento de pesos hay solo siete u ocho clases de levantamientos —el levantamiento muerto, la arrancada y demás— y ahí acaba todo, mientras que en el atletismo, hay numerosos tipos de modalidades. Si alguien descubre algo nuevo o inventa algo nuevo en cualquier terreno, naturalmente estará sujeto a la crítica salvaje. Pero solo tenemos que buscar una cosa en nuestras vidas: inspiración-estímulo.

Mucha gente me ha alentado, pero de todos ellos, cuánto me ha ayudado Mahasamrat Bill Peart —World’s Best Built Man of the Century, 5 veces Mr. Universo, etc.— no podréis percibirlo. Al Oerter, Frank Zane, Mike Katz, Wayne DeMilia, Jim Smith y otros me han ayudado realmente, pero la contribución de Mahasamrat a mi mundo del levantamiento de pesos es inigualable.

En la vida, Dios nos anima cuando hacemos algo bueno y grande para la humanidad. Existe siempre un mundo positivo y un mundo negativo. Algunos criticarán. Dirán: «Mi modo es el modo real. Tu modo es siempre el modo equivocado». ¿Qué puedes hacer? Por otra parte, hay muchas, muchas personas que lo apreciarán, como Jim Smith, Al Oerter y toda esta gente. Nuestro juez internacional, Wayne DeMilia, se quedó parado justo a mi lado, a solo un metro de distancia, y me observó cuando yo levantaba.

Cuando hago algo, sé que mi Supremo es cien por ciento responsable. Justo ayer, en mi oración para el levantamiento de pesos dije: «En verdad, un viaje místico». Sé que si puedo levantar estos pesos pesados, será gracias a la Bondad infinita de Dios. Solo Él sabe cuándo seré capaz de completar mi viaje, pero con cada paso adelante, le ofreceré a Él las lágrimas de gratitud de mi corazón.

Quiero que quede muy claro que estoy compitiendo conmigo mismo. Que otros compitan consigo mismos. Cuando alcancen sus alturas-cumbres, si quieren progresar en incrementos grandes de 50 kg o 150 kg, en lo que sea que estén haciendo, que lo intenten a su propia manera. Si están haciendo salto con pértiga o salto de longitud u otra cosa en su propio campo, que traten de aumentar el incremento. Mi actividad, tal vez dirán, es algo desdeñable. No vale la pena intentar. Pero pueden intentar lograr en su propia actividad lo que yo estoy logrando.

Algunas personas no pueden identificarse con mi levantamiento de pesos porque sienten que no hay ninguna espiritualidad implicada. Sienten que la espiritualidad es algo más. No, la espiritualidad está en todas las cosas. La espiritualidad abarca y abraza todas las cosas en la vida. La espiritualidad no puede separarse de lo físico. Si lo físico es descartado de lo espiritual, entonces no hay espiritualidad. Este físico tiene que aspirar, igual que lo espiritual aspira a su propia manera.

En mi caso, Dios me está dando una buena lección. En mi adolescencia, me disgustaba el levantamiento de pesos. «Disgustar» es un eufemismo; yo odiaba el levantamiento de pesos. En toda mi carrera en el Ashram, cuando fui campeón supremo por 16 años, dos días al año levantaba 10 kg para hacerlo bien en el lanzamiento de peso. Fui primero muchos, muchos años. Luego llegó alguien que era dos veces más grande que yo y, oh Dios, los dos últimos años perdí.

Para volver al tema, quienes quieren que yo levante de acuerdo con lo que otros esperan o exigen deberían dejar de alimentar esa clase de opinión. Si quieres ser un verdadero discípulo mío, piensa a mi manera, siente a mi manera, haz todo en la vida a mi manera. Justifícame en todo momento, defiéndeme en todo momento. Pero no digas: «Oh, te creo, pero otros no, así que estoy tratando de perfeccionarte». Aquí la perfección es tu unidad —unidad con mi voluntad, unidad con mi determinación, unidad con mi logro—. No me mires con los ojos de los demás. Mírame con tu propio corazón. Si quieres identificarte conmigo, hazlo no pensando de la forma en que otros piensan en mí sino sintiendo del modo en que tu corazón aspirante me siente. Ese es el único modo en que podrás progresar. De lo contrario, el mundo externo de la crítica te devorará. Por más que estés en la barca, te perderás todo, lo perderás todo.