Pregunta: A veces la gente dice que siempre es mejor el sueño que la realidad, y que la búsqueda de algo es mejor que su consecución, porque cuando se alcanza el objetivo no hay ningún otro sitio adonde ir. ¿Se aplica esto también a la vida espiritual?
Sri Chinmoy: En la vida espiritual tenemos que saber que no hay un final para nuestro viaje, porque Dios no está ni puede estar satisfecho con algún nivel en particular. El sueño de hoy se transformará en la realidad de mañana. Pero además, la realidad de mañana será insignificante comparada con la realidad a la que apuntamos al día siguiente. No hay final para nuestra realidad porque tenemos lo Divino infinito dentro de nosotros constantemente. Nuestro objetivo es cambiar el rostro de la realidad en algo cada vez más brillante, en lo más brillante, y cada vez más alto, en lo más alto. E incluso en lo más alto, la realidad tiene que ir cada vez más y más allá, porque Dios no acepta, ni puede aceptar, ni va a aceptar nunca algún final para Su creación. La creación es Su progreso, Su propio movimiento; y Dios quiere un progreso sin fin en infinitas maneras.
Sri Chinmoy, Más allá-dentro (Una filosofía para la vida interior)., Agni Press, 1975