322. No hay razón real
No hay una razón realpor la que no puedas hacer
tu mente pacífica,
tu corazón dichoso,
tu vida sosegada,
tu alma triunfante,
tu Dios pleno de bendición.
Tan sólo reemplaza tu duda venenosa
por tu fe intachable.
Sri Chinmoy, Diez mil llamas en flor - 4, Agni Press, 1979