21.

Mi Señor,
yo tengo millones de deseos.

¿Tienes Tú algunos deseos?
“Si, mi niño, los tengo.”

¿Los tienes?
¡Por favor, dime cuales son!

“Mi único deseo es verte eternamente feliz.
¿Podrías satisfacer Mi deseo?”

Lo intentaré, mi Señor.

“Inténtalo, mi niño, inténtalo.”