86.

La diferencia entre Tú y yo, mi Señor, es esta: yo vengo a Ti cuando Te necesito; Tú vienes a mí incluso cuando no me necesitas.

“Mi niño, ¡parece que tendré que corregir tu filosofía toda Mi Vida!
Tú vienes a Mí exteriormente cuando Yo te necesito interiormente.
Yo vengo a ti incluso cuando Me necesitas inconscientemente.”