AUM

Madame H.P. Blavatsky, la fundadora de la Teosofía, observó Aum de una manera muy sencilla y significativa. Dijo: «Aum significa buenas acciones, no meramente un sonido de los labios. Debéis expresarlo en hechos». Para saber lo que es Aum y lo que representa, se aconseja estudiar los Upanishad que hablan de Aum. El Mandukya Upanishad nos ofrece explícitamente el significado de Aum.

El sentido de Aum puede aprenderse en los libros; pero el conocimiento de Aum nunca puede obtenerse estudiando libros. Debe obtenerse viviendo una vida interna, una vida de aspiración, que transportará al aspirante a los más altos niveles de conciencia. La forma más fácil y más efectiva para ascender a lo alto, a lo más alto, a lo altísimo, es cargarse de amor puro y devoción genuina. La duda, el temor, la frustración, la limitación y la imperfección están obligados a someterse al amor devoto y a la devoción entregada. El amor y la devoción tienen el poder sin igual de poseer el mundo y ser poseídos por el mundo. Amad la manifestación de Dios; encontraréis que la creación cósmica es vuestra. Dedicaos con devoción a la causa de la manifestación cósmica; veréis que os ama y os reclama como suyos.

Es cierto que el conocimiento puede daros lo que el amor y la devoción; pero muy a menudo no se cultiva el conocimiento por amor a la Verdad, sino para la satisfacción de deseos. Infructuosa es la búsqueda del conocimiento, cuando el deseo predomina en ella. Cuando el aspirante es todo amor y devoción, se remonta a lo alto.

Durante el vuelo de su viaje canta:

No más sollozará o se afligirá mi corazón.
Mis días y noches se disuelven
   en la Luz misma de Dios.
Por encima de los afanes de la vida, mi alma
es un Ave de Fuego volando a través de lo Infinito.

Al final del vuelo de su viaje canta:

He conocido al Uno y Su Juego secreto;
Y atravesado el mar del Sueño de la Ignorancia.
En armonía con El, retozo y canto;
poseo el Ojo dorado del Supremo.

Ahora ha devenido en su propia Meta. Con amor propio, canta:

Profundamente ebrio de inmortalidad,
soy la raíz y las ramas de una fecunda inmensidad.
Mi Forma he conocido y realizado.
El Supremo y yo somos uno —a todo perduramos—.

— Sri Chinmoy, Revelation

Sri Chinmoy, Comentario del Bhagavad Gita: el Canto del Alma trascendental, Rudolf Steiner Publications, Blauvelt, New York, 1971