Pregunta: ¿No es necesario controlar primero la mente para recibir la Luz divina?

Sri Chinmoy: Si queremos controlar la mente con nuestra voluntad, será como pedirle a un mono que no nos moleste. La naturaleza misma del mono es mordernos y pellizcarnos. Es imposible detenerlo. Pero podemos hacer emerger la luz del alma, que tiene un poder ilimitado. En el mundo exterior, cuando alguien es superior en fuerza o poder, trata de castigar a quien lo está molestando. Pero en la vida espiritual, la luz del alma y la luz del corazón no castigarán a la mente. Por el contrario, la luz actuará como una madre muy afectuosa. Saldrá al frente y tratará de transformar la mente. Sentirá, como lo hace una madre, que la imperfección del niño es su propia imperfección. El corazón sentirá que la oscuridad, la impureza y la oscuridad de la mente son sus propias limitaciones y, al mismo tiempo, estará en condiciones de ofrecer su luz —la luz que recibe del alma— a la mente. Tenemos que usar el poder superior, la luz del alma, para controlar la mente. Si tratamos de controlar la mente antes de hacer descender la Luz divina, fracasaremos lamentablemente.